Oslo abraza al cine mexicano con Corina
Foto: Film fra Sør
La presentación de Corina en Oslo fue mucho más que una función de cine: fue un encuentro cultural que nos recordó por qué es tan valioso que el cine mexicano viaje, se vea y se escuche fuera de nuestras fronteras.
La sala estuvo sold out, llena de personas curiosas por conocer historias contadas desde nuestra mirada. Fue un privilegio compartirla en un espacio como Vega Scene, con un público tan diverso y tan atento.
Tener a Urzula Barba Hopfner presente fue uno de los grandes regalos de la noche. Su sensibilidad, su claridad al compartir su proceso creativo y su forma de hablar del cine como un puente entre mundos marcaron un Q&A cálido y muy humano.
Más allá de su historia que sigue a una mujer enfrentándose a un reto profesional y personal que la obliga a salir de su zona segura Corina conecta porque habla de algo universal: el miedo, la valentía y el acto de avanzar aun cuando el cuerpo tiembla. Es una película íntima, honesta y profundamente empática.
Corina no solo es una historia profundamente mexicana, sino que también tiene un vínculo especial con Noruega: su protagonista, Naian González Norvind, es mitad mexicana y mitad noruega, lo que añade una dimensión única a la película y refuerza la conexión con la audiencia local.
Pero lo más significativo es lo que representó para nuestra comunidad.
Tener cine mexicano en un país como Noruega importa porque: Nos visibiliza como una cultura viva, creativa y compleja. Rompe estereotipos, mostrando narrativas que van más allá de los clichés. Crea puentes culturales, permitiendo que el público noruego descubra historias contadas desde nuestro idioma, sensibilidad y contexto. Permite que la diáspora se vea reflejada, que nuestras emociones, paisajes y personajes tengan un lugar en pantallas que usualmente muestran otros mundos. Fortalece el intercambio cultural, mostrando que México no solo exporta tradiciones, sino también cine de calidad, cine que piensa, cine que siente.
Este evento fue posible gracias a una colaboración muy especial.
Queremos agradecer profundamente a Ana-Marija Grøndahl, Main Producer, por guiar un Q&A impecable y lleno de profundidad. Linnea Holmene, Producer, por coordinar este proyecto con una dedicación enorme y por confiar en nuestra comunidad. Diego Alberto Dewar, responsable de Asuntos Comerciales, Cooperación y Culturales en la Embajada de México, quien impulsó desde el inicio que esta colaboración fuera posible.
Foto: Oscar Rangel
A todas las personas que asistieron: gracias por llenar la sala, por escuchar, por emocionarse y por apoyar este tipo de encuentros culturales.
No solo vimos una película: celebramos la fuerza del relato mexicano aquí, tan lejos y tan cerca a la vez.

